GALICIA ARDE

La semana pasada colgaba muy contenta en el blog unas fotos sobre la excursión que habíamos realizado a las Fragas do Eume y os invitaba a todos a conocer el lugar porque me parecía maravilloso y mágico. Si quieres verlo pincha AQUI.

Pero muy tristemente no pasaron dos días y en las noticias de ese fin de semana escuché que las Fragas do Eume estaban ardiendo. No podía ni creerlo, un lugar tan bonito devastado por las llamas sin ningún tipo de compasión. Pensé que era una tragedia, pero cuando escuché que había sido intencionado no podía creerlo, porque no entiendo como puede haber gente que se dedique simplemente a quemar bosques por diversión y por maldad, y me entró tanto coraje que casi lloro de la rabia, porque me sentía tan identificada con ese lugar al revivir momentos tan divertidos y agradables, a la par que preparaba la entrada del blog la semana pasada, que me dio muchísima tristeza el pensar que tardará mil años en regenerarse y que ya no podemos hacer nada para solucionarlo. ¡Una macabra ironía de la vida!

Llevamos un invierno sequísimo, de los que no estamos acostumbrados aquí en Galícia, y lo estamos sufriendo con incendios provocados cada fin de semana y prácticamente cada día escuchamos en las noticias; veinte incendios en Orense, las Fragas do Eume se queman, la zona norte de Portugal arrasada por los incendios, los alrededores del Mondariz en llamas... ¿Cuando tomarán conciencia aquellas personas que se dedican a quemar bosques de que nos están perjudicando a todos?

El domingo de camino a casa bajando de Ferrol el cielo se partía en dos bajo una estela de humo y cenizas y me llenaba de desazón al pensar que mis queridas Fragas ardían y que bajo una jornada seca el fuerte viento no haría más que obstaculizar las labores de extinción. ¡Basta ya de masacrar montes! ¡Basta ya de tanta incomprensión hacia la naturaleza que nos rodea! Debemos cuidarla hasta el extremo, porque de ella dependemos y si ella muere, inevitablemente moriremos nosotros.

Una lucha continua entre personas que ven bosques y mares como una fuente de inspiración contra una pandilla de desalmados que simplemente buscan su propio beneficio sin darse cuenta de que sin ella no somos nada y que estamos abocados a la extinción.

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